Taladros eléctricos vs Taladros manuales

Aunque parezca arcaico, hasta el día de hoy, aún se siguen ocupando taladros manuales para perforar huesos, y no por un asunto de que el hospital tenga escasos recursos, sino porque presenta varias características que en algunos casos pueden hacer de ellos una mejor opción.
A continuación mencionaré algunos pros y contras de usar tanto taladros eléctricos como manuales.

Cuando se utilizan taladros manuales, puede ser difícil comenzar la perforación en las superficies duras, curvas o de hueso cortical si previamente no se ha realizado un pequeño agujero ya sea con una lezna o un punzón afilado, de caso contrario, la punta del taladro tenderá a resbalar del punto deseado.
Otro contra del taladro manual, es que es difícil controlarlo si se necesitan ambas manos para controlarlo. Pore ejemplo, puede ser necesario limitar (en mm) la penetración de la punta de la broca y para ello, se asegura que sólo sobresalga de la cabeza del taladro la longitud necesaria de broca, esto se logra fijando una abrazadera a la broca que haga las veces de tope cuando contacte con la superficie del hueso.
Una ventaja del taladro manual es el hecho que al perforar, va seccionando el hueso, lo que evita la penetración incontrolada (sumamente importante cuando se taladra la cavidad craneal). De esta forma, la abertura se puede ampliar mediante fresas que harían las veces de una lima circular.
Otra ventaja del taladro manual, es que no genera temperaturas que puedan dañar tejido o terminales nerviosas

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Ejemplo taladro manual

Por otro lado, los taladros eléctricos al accionarse mediante motor, permite concentrar el pulso en el lugar de perforación al no tener que girar manualmente la broca.
Sin embargo, debido a la alta velocidad en la que pueden girar, son muy frecuentes los deslizamientos, los que pueden romper tejido cercano a la zona de perforación.
A diferencia de los taladros manuales, lo eléctricos generan peligrosas temperaturas al momento de perforar, por lo que es necesario el constante enfriamiento de la broca con suero salino estéril frío, así como también evitar las perforaciones continuas y prolongadas.
Los restos óseos (lo que podriamos llamar viruta) se extrae con una succionadora de aire, similar a la que usan los dentistas.

Taladro eléctrico

Cuidados en el uso de tornillos en huesos

Si son correctamente utilizados, los tornillos logran ser un instrumento versátil y útiil cuando se desea fijar los fragmentos óseos y las placas metálicas, o algun material protéstico al hueso.
Los tornillos pueden ser fabricados de una gran variedad de materiales, como acero inoxidable, titanio o vitallium. Para el caso del titanio, tiene la característica que no provoca reacción tisular (inflamaciones o rechazo del tejido que recubre el hueso) y tampoco interfiere en las imagenes de resonancia magnética.
Un aspecto importante, en la elección de los metales a usar conjuntamente, por ejemplo, cuando se utilizan tornillos de un metal, en conjunto con alguna placa de algún otro metal, puede generarse una reacción electrolítica que debilita el metal y provoca resorción ósea.
Antiguamente, se usaban tornillos autorroscantes que cortaban un canal espiral para alojarse a medida que eran introducidos en el hueso. Aunque se usan hasta el dia de hoy, no poseen un agarre fuerte como los tornillos que se insertan en roscas realizadas previamente.




En la figura, se puede observar que el tornillo colocado en un agujero preformado (figura A) tiene un agarre mejor que el tornillo autorroscanet (figura B)

Elección de Broca

En esta entrada, se verán los distintos tipos de problemas que se pueden presentar al momento de elegir una broca en mal estado para taladrar huesos, los tipos de defectos y sus consecuencias.

Una punta roma es uno de los defectos más importantes e inadvertidos. Cuando la punta está afilada, todo el calor generado durante la trepanación se disipa virtualmente a través de las esquirlas óseas que se forman. Incluso una punta ligeramente roma aumenta de modo espectacular la fricción entre la punta y el hueso. Esta fricción genera un calentamiento excesivo que puede afectar la resistencia del hueso alrededor del agujero y provocar un corte ineficaz, lo cual resulta en un agujero de mayor tamaño.

Las espirales de la broca pueden presentar estrías y muescas que dañen las paredes del agujero, causando uncalentamiento excesivo e irregularidades en el agujero lo que comprometería la sujeción del tornillo para la prótesis.

Las brocas con elvástago mellado no se asientan bien en el mandril del taladro y causarían el mismo problema que una broca descentrada.

Si la broca no se coloca correctamente en el mandril del taladro o si quedan residuos en el mandril o el vástago, la broca puede descentrarse.

Otro error consiste en meter la broca demasiado dentro del mandril, lo cual daña las espirales cuando se aprieta el portabrocas.

En la siguiente entrada se verán algunos aspectos técnicos asociados al uso de los taladros para la perforación de huesos.

Introducción

"Un médico rural en Australia salvó la vida de un niño con una grave herida en la cabeza, recurriendo improvisadamente a un taladro eléctrico de carpintero para trepanarle el cerebro al ver que el niño sufría una hemorragia posiblemente fatal y tenía pocos minutos para hacerle un agujero en el cráneo que aliviara la presión"

Esta noticia ilustra muy bien el tema de este blog "mecánica invasiva", el cual trata del uso de herramientas (las mismas que hemos estudiado en clases o muy similares) en medicina invasiva del tipo más extremo como son amputaciones, taladrado de huesos, etc. Donde veremos que la elección del tipo de brocas o velocidades de corte o de revolución serán vitales a la hora de hacer una buena cirugia evitando rupturas de huesos o daño de tejido por temperatura ocacionada por el roce, etc.

A modo primera entrada, dejaré una breve reseña de lo que será la próxima entrada que suba a este blog, que hablará de los cuidados que se deben tener a la hora de elegir una broca para la perforacion de un hueso.

Por lo general, se perforan agujeros en el hueso con el fin de colocar tornillos que fijen implantes. Prestar cuidadosa atención a los detalles de la selección del equipo y a la perforación de los ahgujeros es esencial para la colocación de cualquier implante de fijación. Las roscas del tornillo penetran en el huesomenos de 0,5 mm. Cualquier fallo del equipo o la técnica que disminuya significativamente este margen reducirá la fuerza de sujeción de los tornillos. Dada la gran carga que soportan la mayoría de los implantes,la fuerza de sujeción de un tornillo es de gran importancia.
La concentración de fuerzas que se produce cuando un tornillo no se mantiene correctamente puede provocar una rápida rotura del implante.